DENUNCIA EN UNA COMISARIA DE POLICIA
Aunque tengas muchos años, y en mi caso son ya los noventa, nunca se puede decir que ya lo sabes todo y que has tenido, a esta edad, toda clase de experiencias. Por ejemplo, hasta el pasado mes , no había sufrido una estafa, aprovechándose de mi tarjeta de crédito , y ,hasta esta mañana, nunca había visitado, como usuario, una Comisaria de la Policía Nacional. Y de estas dos experiencias va a tratar este articulo, por si sirve a algunos de mis lectores para evitar estas situaciones ,que no creo que sean de su agrado, al memos que las tomen como dos anécdotas, sin mas importancia que enriquecen su conocimiento de lo que es la realidad, hoy día, con bastante frecuencia.
La primera experiencia, la de la estafa, al parecer es muy frecuente, según me dicen en el banco y en la comisaria. Al parecer son bastantes las persona estafadas por este método que consiste en copiar , con medios cada vez mas sofisticados, mi tarjeta de crédito, y luego utilizarla, bien para sacar dinero de los cajeros automáticos o haciendo alguna compra real o ficticia. Conmigo lo tenían difícil ,pues solo utilizo esta tarjeta para sacar dinero del cajero y para prácticamente nada mas, por ser de los antiguos que siempre pago con dinero en efectivo, precisamente por temor a alguna estafa de ese tipo. Fue Raquel,mi mujer, la que "levanto la liebre" al ver un pago en la tarjeta destinado, a un comercio denominado clubofebooks.com, sin que yo hubiese hecho alguna compra al mismo , sin conocer incluso su existencia. Menos mal que fueron solo dos veces y poca cantidad cada vez, 29.90 euros . Consultado al banco , en ese mismo instante me recogieron y anularon la tarjeta y me entregaron un documento acreditativo para que fuera a Comisaria a denunciar el hecho, con objeto de evitar que continuase la estafa y recobrase del seguro de la tarjeta , la cantidad estafada hasta entonces. Y tengo que escribir, en honor a la verdad , que casi siempre no salgo muy contento como de los bancos, por el tiempo perdido en ellos, en esta ocasión solo puedo decir que en La Caixa, todo fueron facilidades y rapidez en la atención
La segunda experiencia fue en la Comisaria esta mañana. Y puesto a decir la verdad, como siempre pretendo expresarlo, esta vez mi sensación de la visita fue agridulce. Y no se tome esta parte del articulo , como una simple critica , buena o mala, sino como un deseo de que contribuya , aunque en una parte infinitesimal, a la eficacia y eficiencia de un servicio publico , como es ,y mucho, una Comisaria de Policía. De entrada ,dos policías vigilaban la puerta y cuatro agentes mas, estaban sentados en un pequeño cuarto anejo al hall. Eran las once de la mañana ,y dos señoras mas estaban en una sala de espera para ser recibidas, como yo. Eran las doce y cuarto y la primera llevaba esperando desde las once ,y la otra desde las doce, con lo cual mis ánimos se vinieron abajo pensando que no tendría yo mejor suerte en el tiempo de espera. Supongan la cara y el humor con la que entre, a la una y pico en el despacho del único agente que estaba destinado a atender a usuarios como yo, después de tan larga espera. . Me atendió muy amablemente y en diez minutos resolvió mi problema, pero salí de su despacho indignado ,por la escasez de personal , destinado a atender al publico, que podía ser numeroso , soportando horas de espera mientras que entre la puerta y el despachito de la entrada sumaban seis agentes, para lo que yo consideraba escasa misión Y esta indignación me animo a escribir este articulo , denunciado la escasez de personal para atender al publico que va a presentar una denuncia, tan frecuente como la que yo presentaba, y quería compararlo con la abundancia de personal armado vigilando. Y para cerciorarme de que no iba a cometer una"fake news" o un bulo, de los que cierta prensa abusa, pregunte al salir , en el despachito de la entrada, la razón de mi larga espera, y si esto era lo habitual. Y me contestaron que esto no era lo corriente y es que esta mañana habían traído a un detenido sobre las diez y le estaban sometiendo a declaración , en el mismo despacho que posteriormente me habían atendido a mi y que la razón de que tantos agentes hubiera en el despachito, era su pertenencia a la escolta que custodiaban al mismo y allí solo estaba un funcionario diariamente , con misiones concretas. Y efectivamente ,a la una y media se fueron todos los agentes escoltando al detenido y me hicieron recordar el dicho que las comparaciones, son odiosas, y no debemos juzgar prematuramente, sin conocer toda la verdad. cosas que yo queria hacer al pensar en escribir el articulo
Mi gratitud a los agentes de la policía por su amabilidad en atenderme, y luego aclararme las razones de mi larga espera, pero eso no es motivo para dejar de expresar en este articulo el fallo en el funcionamiento eficiente de la Comisaria, determinado por que haya solo una solo persona para atender al publico, o a lo sumo dos ,utilizando la misma medida de tiempo para una detenido, de declaración larga, no se por que motivo, ,pues ni lo pregunte, ni me importa, que estuvo mas de una hora declarando o con tramites burocráticos o que para para mi, como denunciante , que en diez minutos, ese mismo agente , acabo con mi problema , incluyendo declaración y las firmas de la misma.
Pero mis conclusiones y reflexiones sobre estas dos experiencias no quedan aquí , pues luego pensé que lo sucedido con mi tarjeta de crédito, y mi larga espera en la Comisaria , no son hechos aislados o que me hayan pasado a mi solo ,sino que son frecuentes, y han pasado y pasan ,y lo que es mas preocupante , que pueden ocurrir con mas frecuencia y gravedad en el futuro, en otros campos de la realidad. Y la causa puede estar en dos tendencias a tener en cuenta, una ,la progresiva tecnificación e instrumentalización de las actividades y la cobertura de necesidades de nuestra vida habitual ,con la utilización de cajeros automáticos, compras on line y operaciones bancarias a través del móvil, que pueden dar lugar a mas engaños y estafas ,como la que a mi me hicieron ,pero mas graves. Y la otra ,es la sustitución de la persona destinada al servicio al publico, por un aparato o robot ,que presta análogos o parecidos servicios, autónomamente, o mediante una consulta o una denuncia o una petición, que se hace por internet ,a no se sabe quien. Es la deshumanización en las relaciones entre las personas. que ahorra puestos de trabajo, da mas beneficios a las empresas, que complica la resolución de problemas a personas mas vulnerables o de mas edad y que aumenta mas el paro , con las repercusiones económicas, psicológicas y sociales que esto supone. Son peligros a no muy largo plazo, que ya teníamos que ir previniendo, con mas normas legales adecuadas, y mejor información al publico sobre la utilización y efectos de los últimos avances científicos y tecnológicos en nuestra vida habitual
Alejandro Jose Domingo Gutierrez
Madrid 24 de Junio del 2024
