DECIR LA VERDAD. ¿ DONDE TRATARME?

            Este articulo es continuación de uno anterior, publicado en el blog y  titulado "como y cuando decir la verdad a un enfermo con cáncer". Me quedaba una preguntar por contestar a esa  antigua paciente que me pedía consejo después de ser diagnosticada de un tumor maligno, solo   unos días antes. Quería saber si debía seguir tratándose en el hospital de la red asistencial publica ,donde habían  diagnosticado su problema, o debía trasladar su historial a otro centro medico privado, nacional o extranjero, donde el tratamiento fuera mas efectivo. Y me daba los nombres de algunos de estos centros aconsejados por amigos y conocidos y de alguno en el  extranjero , concretando en este ultimo caso en el Anderson de Houston , pues  ella suponía  que yo conocía este centro   muy bien , con motivo  de pacientes a los cuales , según   algunas  noticias, yo  había enviado años atrás a ese hospital  ,incluso acompañándoles en su estancia. en algún caso, según había visto en una foto de una revista del corazón.

                                Donde tratar mejor un tumor maligno

  Esta pregunta ,sobre donde es mas conveniente tratar un tumor maligno , se me ha planteado muchas  veces a mi, como medico , igual que  a mis colegas , dando respuestas  un poco distintas a  cada paciente  , pues hay que estudiar muy bien  cada caso para científica y éticamente poder contestarla con seguridad y firmeza. Y hacerlo  sin pensar demasiado en las consecuencias que para tu crédito personal va a suponer si el centro, al cual tu  aconsejabas, luego no respondías a las expectativas que tu respuesta alimentaba. Es mucha responsabilidad la que asumimos los médicos y por eso tenemos que valorar las circunstancias que concurren en el tipo de tumor, en el centro que le están tratando, en el centro que podemos  aconsejarle, pero sobre todo en las circunstancias de todo tipo en que se encuentra el paciente en esos momentos, psicológicas.  económicas. grado de desarrollo del proceso, ambiente familiar, etc.etc. 

                                  De como conteste a nuestra paciente

Pero volvamos a lo nuestro que era contar como conteste a la paciente, objeto de esta historia, para  que sirva un poco de ejemplo de como , según mi criterio, determinado por mi experiencia, se debiera actuar  en estos casos. Primero me entere muy bien de su historial medico  e informe clínico, facilitado por el servicio de Oncología del hospital publico donde habían diagnosticado el tumor y de las circunstancias  psicológicas, sociológicas, económicas ,etc,, de la paciente , a las cuales antes me refería.  En segundo lugar,  busque y encontré  fuentes fidedignas de información acerca del funcionamiento , experiencia y  resultados,  en este tipo de tumor , del Servicio  de Oncología  de ese hospital que la estaba atendiendo y de las pruebas a través de las cuales habían hecho el diagnostico .Incluso habían publicado un articulo en una prestigiosa revista sobre un estudio que habían realizado sobre su experiencia en este tipo de tumores. Y con toda sinceridad la confesé que según mi opinión en ese Servicio  la estaban llevando muy bien y debía continuar tratándose allí.

Pero salio lo de siempre, que fue  la insinuación de que quiza en un centro privado tendrian aparatos mas modernos y técnicas mas avanzadas para su caso, y me citaba uno de ellos concretamente. Podía contestarla con una opinión personal mía de que la Sanidad Publica no tiene en la mayoría de los casos ninguna diferencia, en el tratamiento de casos como en el suyo, con  la Sanidad Privada e incluso algunas veces la mejora. Pero preferí ser mas objetivo y comprobar como trataban casos como el suyo en ese hospital que ella indicaba y como eran los resultados científicamente comprobados en el mismo  y así se lo comente. Sus deseos de curación , siguieron con una nueva pregunta que ya casi esperaba acerca de si  en  el extranjero no había mas probabilidades de curación , como buscan los que hasta allí se desplazan. Y mi contestación fue un poco decepcionante para ella , al no encontrar diferencias entre lo que la podían hacer los oncólogos de allí que los de acá. Pero además  había otros factores como los económicos, aunque ella por curarse me decía que  se gastaba lo poco que había ahorrado o vendía el piso en que vivía.

                       Surge la opinión de los familiares o la del amigo listo

Pero aunque las dudas sobre si debía seguir o no  con los oncólogos actuales parecían haberse disipado, surgieron las de algunos familiares que insistían en llevarla fuera de España y hubo que repetir argumentos para vencer esa resistencia y apoyarme  en uno que no pude exponer a la paciente  relativo al pronostico que tenia el cuadro , del cual no podia hablar con una seguridad completa pero si con un alto grado de probabilidades. Mis consejos en unos casos fueron aceptados y en otros casos no, pero quede con la conciencia tranquila de haber contestado lo que honradamente creía era lo mejor. En este caso aceptaron mi propuesta de que la siguieran tratando  en el mismo servicio ,por los mismos oncólogos y mis ultimas noticias es que seguía viviendo y sobre todo con una aceptable calidad de vida en lo físico y sobre todo en lo psicológico. Y la noticia de su enfermedad no la verán reflejada en revistas o cadenas de televisión pues como expuse en el anterior articulo esta paciente no existe, es un personaje ficticio, pero  que podía haber existido 

                        Como consideraron  mis  respuestas en otros casos 

Sin embargo no todo fue tan sencillo en otros casos, con resultado no deseado, en que la contestación a preguntas de  la paciente o a familiares, tuvo que ser mas complicada y criticada por algunos, sobre todo "a toro pasado" ,  cuando la decisión la  tomo el o la paciente y los familiares, y yo me limite a seguir esas normas que siempre me había marcado en las contestaciones y que he explicado con el ejemplo de mi ex famosa.  Como hechos anecdóticos, al familiar de una paciente tuve que acompañarle a un hospital del extranjero  , donde quería que los propios oncólogos del centro le  contestasen   a estas tres preguntas, antes de tomar una decisión. Primera, si con los datos que traíamos era, o no, necesario que fuera ella allí, para corroborar el diagnostico o completar el estudio. Segunda, si el tratamiento que ellos  aconsejaban en ese centro  era el mas adecuado en ese momento para su situación clínica. Y  tercero, si ese tratamiento podría ser llevado con las mismas garantías en ese hospital que en España. Las contestaciones debieron convencerles pues allí la llevamos.. Y en otro caso distinto , ante  mis argumentos que igual daba tratarla en España que fuera, los familiares , de común acuerdo , decidieron que permaneciera  aqui,  sin abandonar el centro donde la estaban tratando , aunque el resultado desgraciadamente fue igual en un caso y otro , aunque fuera  tomando decisiones distintas.

                                       Mensaje de esperanza

Pero este modelo de paciente con cáncer, que he querido reflejar en este articulo, afortunadamente no es el mas frecuente, y, por lo contrario, lo son otros con un pronostico mejor manifestado un mayor porcentaje de supervivencia con mayor calidad de vida. Los exámenes de salud, las campañas de prevención, los avances científicos diagnósticos y terapéuticos, y  la mayor concienciación de la población respecto al problema han mejorado el pronostico y la posibilidad de dar contestaciones mas optimistas, mas esperanzadas, mas verdaderas, a nuestros pacientes de lo que quieren conocer a través de sus preguntas. Hoy tenemos medios como la colonoscopia , cada dos  o tres años, las citologias periódicas, la determinación de PSA en cualquier análisis de sangre , el seguir unos reconocimientos periódicos ,etc ,etc, que junto a unos hábitos de vida saludable hacen que la palabra cáncer pierda parte de el sentido dramático y fatal , que todavía persiste en nuestras mentes. Si no utilizamos estos,  y otros medios, dé los que disponemos en la actualidad ,para la prevención y diagnostico precoz de esta enfermedad es que somos unos insensatos y necios.

                     Razones por las que escribí estos dos artículos

Comprendo que son dos artículos que tratan de un tema poco divertido y quizá solo podían interesar de entrada a los que estuvieran con un problema similar a la mujer de mi historia. Pero existía una razón general y unas razones mas especificas. La general es hacer llegar  a mis lectores el mensaje de esperanza expuesto en el anterior párrafo, puesto que creía necesario y aconsejable hacerlo, por si podía contribuir en algo a preservar su salud. Y las especificas, referidas a este caso eran ,en primer lugar llegar a la conciencia popular que la contestación a estas preguntas era muy difícil y con mucha responsabilidad añadida. Y en segundo lugar, si queríamos que fuera beneficiosa y no perjudicial para el paciente, debía ser precedida de un estudio detallado de las circunstancias del caso y de unos pasos obligados a seguir para obtener las informaciones precisas para dar la contestación adecuada.. Y tercera , si no conocemos estas circunstancias y no podemos, o queremos ,dar esos pasos obligados , lo mejor que podemos hacer es callarnos , pues aqui "el silencio es oro" nunca mejor valorado

                 

                                              Alejandro .J. Domingo Gutierrez

                                               Madrid Diciembre del 2021

 

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